viernes, 3 de noviembre de 2017

Leyenda de la sortija mágica

En un rincón de Juchitepec, hace mucho tiempo sucedió una leyenda de espanto, una triste tarde de otoño  cuando una mujer compró una sortija con una anciana que iba caminando sola, la viejecita le dijo:

-Señora ¿quieres comprar esta sortija de oro?

Y la compró porque era muy bonita y porque le quedaba bien en el dedo anular.
Entonces la mujer siguió caminando y se encontró con Kevin el muchacho del que siempre estaba enamorada y que nunca le hacía caso, pero esta vez la miró con ternura.
 Ella miró un brillo que salió del anillo y entonces  se dio cuenta que aquella sortija tenía magia, sin embargo el amor de Kevin era lo que más le importaba.

Varios días fueron felices, hasta que inició la guerra y entonces cada hombre de cada familia tuvo que ir a la guerra, Kevin también fue y nunca más se supo de él. Entonces la  mujer sufrió mucho y todas las tardes al salir el sol despertaba con dolor en el corazón, hasta que murió y su espíritu busca a Kevin vagando en las madrugadas.

Los trasnochadores dicen que la ven  acariciando su sortija mágica, esperando ver a Kevin en cualquier caballero que la mira.

Autor: Randall Eliezer Suárez Tapia

Leyenda de la comparsa fantasma

Se cuenta que a principios del siglo pasado, en una majestuosa casona de  Juchitepec vivía una hermosa mujer que disfrutar mucho bailar, pero en esos tiempos la vida en provincia era muy sencilla y las fiestas sociales eran pocas, sólo predominaban las fiestas religiosas, con la clásica música de banda.

Cada vez que pasaba una de estas bandas por la majestuosa casona, ella salía a verla pasar, ya sea desde el balcón con vista al ocaso del sol; o bien al que daba hacia la calle orientada al norte, esto según por donde se escuchara la música. Festividad tras festividad, año tras año, la hermosa mujer disfrutaba la música de banda.

Fue en un carnaval de la década de los 40, cuando Don Nacho a quien le apodaban “Medio Pueblo”, ustedes se imaginaran por qué, fue quien trajo la primera comparsa de chinelos a este pintoresco pueblo. Ese día nació la tradición del chinelo en Juchi, como se le dice de cariño. 

Era la medianoche del 2 de noviembre, cuando la bella dama escuchó la música de chinelos, se asomó al balcón y vio una comparsa y a sus amigas que le decían que fuera con ellas, y así lo hizo, pero nunca se volvió a escuchar de ellas, dicen que se las llevaron las almas de los fieles difuntos.

Si el 2 de noviembre a medianoche escuchas la banda de los chinelos, es la comparsa fantasma que anda en busca de mujeres hermosas, y por qué no, también de guapos caballeros.